sábado, 3 de julio de 2010

My oh sweet little dancer...

Mi pequeña bailarina...
algunas pocas sombras nos separan de nuestro baile final
de nuestro grandioso acto, de nuestro bello vestido de tul, delicado, fino y nuestro.


Mi pequeña bailarina...
termina pronto de alistarte, de peinar tus lindos rizos, de atarte los zapatitos
que algunas pocas, muchas pocas sombras nos separan de nuestro baile final.


El gran salto termina en el telón y el vuelo de tus ojos
y tus manos y tus pies sonríen mientras dibujan estrellas en el amanecer.


Mi pequeña, mi querida bailarina...
termina pronto de temer y mírame de vez en cuando , sólo si es necesario, que yo estaré te estaré esperando con margaritas y café.